Las dietas que seguimos pueden ser un aliado o un enemigo de nuestra salud. A menudo, simplemente con pequeños pasos podemos cambiar nuestros hábitos alimenticios y beneficiar a nuestro organismo.
Pongamos como ejemplo el consumo de aceites vegetales. Un estudio publicado en la versión online de la revista JAMA Internal Medicine demostró que basta con incluir en nuestra dieta una cucharada de aceite vegetal por día para reducir considerablemente el riesgo de cáncer de próstata y otras enfermedades mortales.
La investigación se realizó en la Universidad de California en San Francisco con 4577 pacientes con cáncer de próstata no metastásico . Los sujetos voluntarios fueron seguidos durante ocho años. Al comienzo del estudio se registraron los hábitos alimentarios de los pacientes, a los que los investigadores pidieron que sustituyeran las grasas animales o hidratos de carbono consumidos por grasas extraídas a partir de aceites vegetales, tales como aceite de oliva, aceite de semilla, aceite de nuez, aceite de aguacate y aceite de canola . Durante el período de estudio, un 21% de los pacientes murió de cáncer de próstata y otro 21% falleció de otras formas de cáncer, mientras que un 31% falleció por enfermedad cardíaca.
Al final de la investigación se demostró que los sujetos que habían sustituido el 10% del consumo diario de carbohidratos por aceites vegetales redujeron en un 29% el riesgo de fallecimiento por cáncer de próstata y 26% de riesgo de fallecer por cualquier causa. El estudio también concluyó que el consumo diario de una onza de nueces puede reducir en un 18% el riesgo de cáncer de próstata mortal en un 11% y el riesgo de muerte por otras causas .
Como bien dice el Dr. Erin Richman, autor principal del estudio, "el consumo de aceites y frutos secos saludables aumenta la cantidad de antioxidantes en la sangre, reduce la insulina y la inflamación, con lo que puede detener la progresión del cáncer de próstata. Los efectos beneficiosos las grasas no saturadas y los efectos nocivos de las grasas transaturadas en la salud cardiovascular son bien conocidos. Ahora nuestra investigación ha demostrado más beneficios potenciales del consumo de grasas insaturadas en los hombres con cáncer de próstata".
Es importante señalar que los investigadores aún no definen la relación directa entre el consumo de aceites vegetales insaturados y la reducción de la mortalidad por cáncer de próstata. A la espera de profundizar en el estudio de los beneficios generales para el organismo (especialmente para el sistema cardiovascular) del consumo de grasas saludables, estos constituyen una razón válida para dejar su espacio en la dieta en lugar de grasas animales.
Pongamos como ejemplo el consumo de aceites vegetales. Un estudio publicado en la versión online de la revista JAMA Internal Medicine demostró que basta con incluir en nuestra dieta una cucharada de aceite vegetal por día para reducir considerablemente el riesgo de cáncer de próstata y otras enfermedades mortales.
La investigación se realizó en la Universidad de California en San Francisco con 4577 pacientes con cáncer de próstata no metastásico . Los sujetos voluntarios fueron seguidos durante ocho años. Al comienzo del estudio se registraron los hábitos alimentarios de los pacientes, a los que los investigadores pidieron que sustituyeran las grasas animales o hidratos de carbono consumidos por grasas extraídas a partir de aceites vegetales, tales como aceite de oliva, aceite de semilla, aceite de nuez, aceite de aguacate y aceite de canola . Durante el período de estudio, un 21% de los pacientes murió de cáncer de próstata y otro 21% falleció de otras formas de cáncer, mientras que un 31% falleció por enfermedad cardíaca.
Al final de la investigación se demostró que los sujetos que habían sustituido el 10% del consumo diario de carbohidratos por aceites vegetales redujeron en un 29% el riesgo de fallecimiento por cáncer de próstata y 26% de riesgo de fallecer por cualquier causa. El estudio también concluyó que el consumo diario de una onza de nueces puede reducir en un 18% el riesgo de cáncer de próstata mortal en un 11% y el riesgo de muerte por otras causas .
Como bien dice el Dr. Erin Richman, autor principal del estudio, "el consumo de aceites y frutos secos saludables aumenta la cantidad de antioxidantes en la sangre, reduce la insulina y la inflamación, con lo que puede detener la progresión del cáncer de próstata. Los efectos beneficiosos las grasas no saturadas y los efectos nocivos de las grasas transaturadas en la salud cardiovascular son bien conocidos. Ahora nuestra investigación ha demostrado más beneficios potenciales del consumo de grasas insaturadas en los hombres con cáncer de próstata".
Es importante señalar que los investigadores aún no definen la relación directa entre el consumo de aceites vegetales insaturados y la reducción de la mortalidad por cáncer de próstata. A la espera de profundizar en el estudio de los beneficios generales para el organismo (especialmente para el sistema cardiovascular) del consumo de grasas saludables, estos constituyen una razón válida para dejar su espacio en la dieta en lugar de grasas animales.
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